Dr. Marco V. Benavides Sánchez.
El dengue, una enfermedad viral transmitida por mosquitos del género Aedes, continúa representando un desafío significativo para la salud pública en muchos países, incluyendo a México. A lo largo de los años recientes, la incidencia y la mortalidad asociada han fluctuado, reflejando tanto los esfuerzos de control como las condiciones epidemiológicas cambiantes.
Hay cuatro serotipos (proteínas contra las que se dirige la respuesta inmunológica) del virus del dengue (DEN 1, DEN 2, DEN 3 y DEN 4). La diferenciación de serotipos es relevante en epidemiología, ya que el sistema inmunitario puede responder de manera efectiva a un serotipo, pero ser insuficiente frente a otro del mismo microorganismo.
Los síntomas suelen aparecer entre 3 y 14 días después de la picadura infectiva. Los signos incluyen fiebre alta, dolores musculares, náuseas, vómitos, dolor detrás de los ojos y sarpullido. En casos graves, puede haber sangrado intenso, descenso repentino de la presión arterial (choque) e incluso la muerte.
Se debe buscar atención médica desde el inicio de la sintomatología, especialmente si el paciente se encuentra en una región donde se conozca la presencia de la enfermedad y esa presencia endémica explique la sintomatología.
Situación Epidemiológica Reciente
En el año 2023, México enfrentó un total de 28,871 casos confirmados de dengue, con 656 defunciones registradas hasta la semana 9 del mismo año. Esta cifra muestra una realidad persistente y preocupante, a pesar de los esfuerzos continuos para mitigar la propagación del virus. Comparativamente, para el año 2024, hasta la semana 9, se han notificado 23,882 casos confirmados y 491 defunciones confirmadas, indicando una disminución en los casos, pero un incremento en la letalidad, que se sitúa en un 0.79%.
Distribución Geográfica
El impacto del dengue no es uniforme en todo el país. En los dos años mencionados, el 74% de los casos confirmados provienen de estados específicos como Guerrero, Tabasco, Quintana Roo, Veracruz y Colima. Esta concentración geográfica resalta la necesidad de enfoques regionalizados en las estrategias de prevención y control.
En 2022, estados como Tabasco y Morelos lideraron en términos de casos por cien mil habitantes, con 13.63 y 6.43 respectivamente. En 2024, Guerrero, Tabasco y Quintana Roo son los más afectados en términos de casos confirmados acumulados, subrayando la persistencia del problema en ciertas áreas.
Tendencias Regionales e Internacionales
El dengue es una preocupación no solo para México, sino para toda América Latina y el Caribe. En el primer trimestre de 2024, la región ha reportado más de 3.5 millones de casos y más de mil muertes. Estas cifras enfatizan la magnitud del desafío y la necesidad de cooperación internacional en la vigilancia y respuesta ante los brotes.
Se calcula que hay más de 100 – 400 millones de casos de dengue en todo el mundo cada año y que 3800 millones de personas viven en países donde el dengue es endémico, la mayoría de los cuales se encuentran en Asia, África y las Américas. El mayor número de casos de dengue notificados se registró en 2023, año en que la Región de las Américas de la OMS notificó 4,5 millones de casos y 2300 muertes. Es probable que los casos de dengue aumenten y se expandan geográficamente debido al cambio climático y la urbanización.
Factores Contribuyentes y Medidas Preventivas
Varios factores contribuyen a la persistencia del dengue en México. Las condiciones climáticas favorables, la urbanización rápida y la acumulación de agua estancada proporcionan un entorno propicio para la reproducción del mosquito vector. La movilidad humana también juega un papel crucial en la dispersión del virus entre comunidades y regiones.
La prevención sigue siendo la piedra angular en el control del dengue. Las campañas de concienciación pública sobre la eliminación de los criaderos de mosquitos y el uso de repelentes son esenciales. Además, los esfuerzos de colaboración entre instituciones de salud, comunidades locales y organizaciones internacionales son fundamentales para implementar estrategias efectivas y sostenibles.
Vacunación
En México la vacuna que se usa contra el virus del dengue se llama Dengvaxia. Es una vacuna de virus vivos atenuados que genera protección contra los cuatro serotipos del dengue (DENV-1 a DENV-4). El esquema de vacunación consiste en tres dosis separadas con seis meses de diferencia entre la segunda y tercera dosis, y está indicado para personas entre 9 y 45 años de edad.
Desarrollado por el laboratorio japonés Takeda Pharma, el inmunizante comercializado con el nombre “Qdenga” se elaboró a partir de virus vivos atenuados del dengue, es decir, con una parte debilitada del patógeno causante de la enfermedad. Es el mismo mecanismo de vacunas como las de las paperas, la fiebre amarilla y la poliomielitis oral.
Según el director médico de Takeda, Qdenga es una vacuna tetravalente, es decir, protege contra los cuatro serotipos que pueden causar dengue sintomático (es decir, el que genera síntomas). Sin embargo, solo se utiliza el serotipo 2 del virus para componer el inmunizante.
El nombre de la tecnología es ADN recombinante, en la que se utilizan genes de los serotipos 1, 3 y 4 para modificar genéticamente el tipo 2. De este modo, el inmunizador estimula el sistema inmunitario humano para que produzca anticuerpos específicos contra cada uno de los tipos de virus del dengue.
Una nueva vacuna contra el dengue ha sido precalificada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) el 10 de mayo de 2024. TAK-003 es la segunda vacuna contra el dengue precalificada por la OMS. Desarrollada por Takeda, es una vacuna viva atenuada que contiene versiones debilitadas de los cuatro serotipos del virus que causan el dengue.
La OMS recomienda el uso de TAK-003 en niños de 6 a 16 años en entornos con alta carga de dengue y alta intensidad de transmisión. La vacuna debe administrarse con una pauta de dos dosis con un intervalo de tres meses entre dosis.
TAK-003 y Qdenga son dos vacunas diferentes desarrolladas por la compañía farmacéutica Takeda para prevenir el dengue. Ambas contienen versiones debilitadas de los cuatro serotipos del virus que causan el dengue, pero Qdenga utiliza solo el serotipo 2 del virus para componer el inmunizante.
Innovaciones y Desafíos Futuros
El avance en la investigación y el desarrollo de vacunas contra el dengue ofrece esperanza para el futuro. Sin embargo, la accesibilidad, la aceptación y la logística de la vacunación a gran escala siguen siendo desafíos importantes. La vigilancia epidemiológica continua y la adaptación ágil a las condiciones cambiantes son cruciales para la gestión efectiva de futuros brotes.
Conclusiones
El dengue representa una carga significativa para los sistemas de salud pública, con fluctuaciones en la incidencia y la mortalidad a lo largo de los años. A medida que los países y las regiones continúan enfrentando serios retos en la lucha contra esta enfermedad, es imperativo fortalecer los esfuerzos de prevención, mejorar la infraestructura de salud pública y fomentar la colaboración global. Solo mediante un enfoque integral y coordinado se puede esperar reducir el impacto del dengue y proteger la salud de las comunidades vulnerables.
Para saber más
(1) PANORAMA EPIDEMIOLÓGICO DE DENGUE – gob.mx.
(2) En 2022 se han reportado dos mil 518 casos de dengue en México.
(3) La OPS México te cuenta todo lo que debes saber del dengue y cómo ….
(4) Informe Semanal Situación Epidemiológica de Dengue en México. – gob.mx.
(5) Dengue – Diagnóstico y tratamiento – Mayo Clinic.
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